La puta quiere follar al marido de la vecina Noemie Bilas


Necesito que alguien se encargue de darme el dinero mensual, pagar mis deudas y mantener mi vida en el lujo. Por supuesto, no quiero trabajar. Entonces, para conseguir el dinero, extorsiono a mis vecinos del barrio. Tienen que ocuparse de mis necesidades y, si se niegan, me follo a sus maridos. Saben de lo que soy capaz y por eso hacen lo que les digo. Una vez, hubo una vecina que se opuso, así que la castigé. La convertí en una versión femenina cornuda. Tenía que verlo mientras yo le daba mamadas a su esposo, quedarse allí mientras me sentaba en la cara de su esposo y él lamía mi coño. La hice mi esclava. Todos lo sabían y desde entonces nadie se niega cada vez que les pido algo.