Zoey Sinn consuela los cuernos de su hermanastro


Zoey Sinn pilló el otro día a su hermanastro, encerrado en su habitación y entre que se iba a hacer una paja y que iba a llorar. Cuando le preguntó qué sucedía, el chico le reveló que su novia le había puesto los cuernos y estaba desolado, de modo que para aliviarle y para que mirara siempre al frente y los múltiples coños que podía disfrutar, ella misma le ofreció el suyo para que lo probara. El hermanastro al ver su morro metido entre las nalgas de esta morenaza, dejó de pensar en los cuernos y se puso al lío, metiéndole la polla a ese coño morenito que siempre había deseado en secreto y que ahora podía follarse por compasión.